Sor Isabel Guerra
Por Manuel Domínguez
Estas obras son el resultante de cuando “se pinta con luz”, donde realmente la belleza no solo la da el color sino la luminosidad
Autodidacta por excelencia, la obra de sor Isabel Guerra se orienta en la dirección propuesta por un pintor de la talla del laureado iraní Imán Maleki. Salvando las distancias propias que impone el ejercicio de cada personalidad y sin entrar en comparaciones, ambos se encaminan hacia el hiperrealismo más puro. Pero hoy vamos a hablar de las pinturas de esta religiosa, quien dueña de una sensibilidad exquisita, ambienta sus trabajos en la paz y el reposo que brinda el claustro. Desde el atelier donde habitualmente trabaja nos invita a compartir profundas vivencias.